La Paciencia

"Señor, abre mis labios y mi boca proclamará tu alabanza" recita un Salmo.

Yo podría añadir, guía mis pies y daré un paso más.
Abre mis ojos y me despierto al nuevo día.
Consuela mis huesitos y no me quejo del dolor en la espalda.
Ayuda a mi voluntad y aguanto con paciencia el dolor del bajo vientre.

Y envía gente que me quiera y me consienta y no extrañaré tanto el agujero vacío en el aire que ha dejado no tener un compañero en este embarazo y especialmente en esta etapa final.

A veces veo las embarazadas tan barrigonas como yo que van de la mano con sus parejas y yo pienso que si tuviera uno al lado me llevaría cargando jejeje...

Tan lejos está lo que quisiera de lo que voy sintiendo. La comodidad y el sueño que quiero están tan lejos de mi rutina de madrugar para ir al trabajo. La situación económica que me gustaría y la realidad de jugar malabares con los pesos. Pero soy paciente. Y lo llevo todo con la alegría de "miss paticas" jugando en mi interior.

En todos los documentos hablan de la grandisisisisisma importancia del afecto brindado por el ambiente circundante de la embarazada y yo sin amargura pienso en la manera en que me ha tocado a mí y trato de imaginar como hubieran sido las cosas con más afecto alrededor... quizás más divertidas pero tampoco ha sido todo tan oscuro...

Quizás sea cierto y he sido muy valiente, como dicen algunos.

Así que para completar mi extraño Salmo:

Señor, fortalece mi corazón y yo te daré una hija llena de fortaleza.